Tuvimos el placer, el pasado fin de semana, de reunir en nuestras instalaciones de Team Building Experiencial de Amazonia Team Factory a profesionales del mundo de la Formación, consultores, facilitadores y coachers provenientes de distintas consultoras y empresas.
Las Jornadas comenzaron con un desayuno que nos sirvió para ponernos cara e ir conociéndonos. Resultaba curioso observarnos desde fuera: un grupo de personas que no nos conocíamos y que compartimos profesión, quedando en fin de semana y asistiendo con la familia a las Jornadas de Team Building Experiencial. En pocos minutos, el porche de la cafetería se convirtió en un hervidero de intensa interacción. Los niños venían emocionados y los adultos expectantes. Los niños porque iban a participar en las actividades del parque de aventura en árboles, Aventura Amazonia; los adultos porque estábamos saliendo de nuestra zona de confort y enfrentándonos a una situación de incertidumbre. Un punto de comienzo estupendo para lo que les quedaba por vivir. Éstos son los puntos de partida idóneos para el avance y desarrollo de las personas.
Y comenzó la aventura… Según íbamos caminando hacia la zona de Team Building fuimos recogiendo al facilitador que iba a dirigir las jornadas, Iván Gandía y que se encontraba suspendido a 5 metros de altura; a los monitores técnicos, que descendieron de forma espectacular desde un rocódromo situado a 9 metros, y todos, al grito de “Súmate”, que se convirtió desde el primer día en nuestro emblema de estandarte.
La sorpresa
Lo que sin duda, no sospecharon nuestros invitados fue que entre los asistentes de las distintas consultoras y empresas que acudieron ambos días, se encontraba un “infiltrado” perteneciente a una empresa ficticia y con algunas “misiones” que cumplir a lo largo de las jornadas. Los resultados de infiltrar a un actor que se integrara entre un grupo de consultores y coachers de Formación, superaron con creces nuestras expectativas. No solo resultó tremendamente divertido descubrir, al final de cada jornada, a nuestro actor infiltrado, sino que además, nos impulsó a reflexionar, entre otras cosas, sobre lo reactivos que podemos llegar a ser ante determinados estímulos, perdiendo así de vista nuestro objetivo.
De la mano de Iván, vimos las dinámicas de Team Building como los profesionales de la Formación debemos mirarlas, con todas las “experiencias” que en sí mismas encierran. Esto nos permite ir personalizando cada acción formativa y adecuándola a distintos escenarios de trabajo. Las posibilidades de reflexión son inmensas y efectivamente, la experiencia que construyen desarrollando este tipo de programas impacta de verdad en nuestras actitudes diarias, en cómo nos relacionamos con nosotros mismos y con el equipo.
Lo que nos llevamos
La vivencia ha sido muy enriquecedora. Hemos contado con unos asistentes de primera. Agradecerles a todos ellos, en nombre del equipo de Amazonia Team Factory su compromiso, su entrega y cómo no, su profesionalidad, que quedó más que patente en sus aportaciones y comentarios. Se crearon ambientes absolutamente colaborativos y motivantes y, en apenas 2 horas, el espíritu que se respiraba es el de “somos un equipo”. Nos emocionó tener esos sentimientos, y pasamos de ser unos desconocidos a hacer una piña y darnos hasta un “abrazo de equipo”. Y éste fue otro punto clave para reflexionar. Generar emociones positivas mejoran nuestra competencia en las tareas, y además, ¡es contagioso!
Para los que nos consta que no pudisteis asistir por motivos diversos, tan solo deciros que en primavera de 2014 repetiremos las jornadas y ampliaremos la invitación a los departamentos de Formación de las empresas interesadas en el método Experiencial, y más concretamente, en Team Building.
Por último, no queremos que baje el telón sin rendir un pequeño homenaje a nuestro equipo de trabajo, que comparten su mejor “saber hacer” y que sin ellos, no nos es posible brindar por los éxitos.
Álbum de fotos | Jornadas Team Building Experiencial - Oct'13 en Flickr (18 fotos)
