La Voluntad existe todo el tiempo, actúe de forma conservadora, manteniéndonos como estamos, o activa e impulsora de cambios y nuevas experiencias.
Claude Bernard, fisiólogo francés y fundador de la medicina experimental, nos decía que “El éxito comienza con la voluntad”, una voluntad individual, social y empresarial que cada vez se encuentra más debilitada. La voluntad se fortalece a base de tomar conciencia y acción, de tener confianza en nosotros y en los otros, y de adquirir una visión común, un objetivo por el que merece la pena unirnos.
Si piensas que estás vencido, lo estás;
Si piensas que no te atreves, no lo harás;
Si piensas que te gustaría ganar,
pero no puedes, no lo lograrás;
Si piensas que perderás, ya has perdido;
Porque en el mundo encontrarás
que el éxito comienza con la voluntad del hombre… (Estrofa, Claude Bernard)
La Voluntad está íntimamente relacionada con determinadas destrezas emocionales, como la Confianza en uno mismo, la Autoestima, la Resistencia a la Frustración y el Compromiso con las tareas y el equipo.
Involucra también a las estructuras superiores del cerebro, poniendo en marcha habilidades cognitivas como la Atención, la Concentración, la Lógica, la Intuición, la Perseverancia y la Constancia.
“Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad o la energía atómica: la voluntad”. (Albert Einstein)
La voluntad, además, genera energía porque aumenta la percepción que tenemos de nosotros mismos, de nuestras capacidades y somos capaces de dirigir nuestros impulsos en acciones que movilizan energías positivas. Me viene a la mente, el slogan de la marca Pirelli, el cual decía: “La potencia sin control, no sirve de nada”. Su slogan se interpretaba tal y como ellos querían, referido a la seguridad de los neumáticos que comercializan, pero aplicado a la empresa nos deja un mensaje muy interesante, porque es precisamente la Voluntad la que canaliza adecuadamente los impulsos, las ideas y los proyectos de una forma ordenada, coherente, con sentido y dirección. En este orden, los líderes de equipo tienen por delante el reto de aunar estas voluntades y conseguir que convivan en equilibrio.